viernes, 15 de junio de 2018

Creemos en los ratones

En mi Mundo Invisible hay muchas cosas en las que creemos , y una de esas son los ratones, ojo no hablo de ratas, sino de los simpáticos ratoncitos que nos han acompañado a lo largo de la vida, que fueron héroes de los más maravilloso cuentos.
Esos animalitos que se han transformado en nuestros ejemplos a seguir como Fievel Mousekewitz, ese pequeño y entrañable animalito que nos conmovió en busca de su sueño americano, que nos contagió las ganas de luchar por esa ilusión que tanto nos mueven hacia grandes proyectos aunque seamos pequeños y tengamos miedo.






 El Super ratón que nos animó a convertirnos en héroes a pesar de nuestro tamaño, luchando contra la adversidad.








El Speedy Gonzales que no temía a los gatos por su velocidad. Y nos hizo reir tanto con su "iapa iapa iapa"










La ternura de Stuart Little con su familia de humanos.







Los solidarios ratones de Cenicienta









Matias de Redwall, ese hermoso cuento que me enseñó que no importa cuán pequeño seas podrás defender todo lo que quieres si tienes fortaleza









Remy el ratoncito cocinero de Ratatouille, el que no le importó lo que era y fue tras su sueño y lo hizo realidad a pesar de las advesidades










El ratón Perez que ha sabido resolver nuestros problemas económicos por unos pequeños dientes








Monsiur Roque Fort el detective de los Aristosgatos, un pequeño detective luchando contra la injusticia








y  muchos otros más que tal vez en este momento esté olvidando.
Ellos nos demuestran en cada libro o película que no les importó el tamaño, ni qué eran, sino que pudieron superar todos los obstáculos para ir en busca de un sueño, para luchar contra la adversidad, contra los villanos, ayudar a sus amigos a riesgo de dejar sus pequeñas vidas en las batallas.

Por eso en este rinconcito creemos que podemos ser como los ratones y superarnos cada día sabiendo que "allá fuera en algún lugar, alguien piensa en mí", que cualquiera puede cocinar, que no importan las madrastras, ni los mayordomos malvados, si vamos en busca de lo que queremos podremos lograrlo.

Estos invisibles personajes que nos llenaron el corazón de amor, hacen que piense que todo es posible en esta vida, sólo si lo deseamos, hay que luchar por ello. Una larga lucha cotidiana, que nos lleva a superarnos cada día.

Demostrando a todos que el tamaño nada tiene que ver con la estatura sino con la grandeza de corazón y la lucha por nuestros ideales y sueños.

Desde ahora cuando las cosas se pongan difíciles seré como mis pequeños ratones diariamente, para ser grande a pesar de mi estatura, del miedo o lo complicadas que se pongan las cosas.

Todos podemos ser mejores cada día.

No hay comentarios: